Disfrutar de las raquetas de nieve en el Valle de Arán es una experiencia formidable. Si no estás familiarizado con ellas, ni con este destino, estás en el lugar correcto. Y, quién sabe, quizás te animes a intentarlo tras leer este post de Alma de Nieve.
Raquetas de nieve: Qué son y cómo se usan
Las raquetas de nieve son accesorios que se acoplan a las botas para moverse sobre la nieve con mayor comodidad y solvencia. Proporcionan la sensación de ir flotando porque aumentan el reparto del peso corporal.
Es una experiencia válida para cualquier público, incluso el inexperto. En consecuencia, siempre es una buena opción para practicar un deporte relajante en plena naturaleza.
Actualmente, se elaboran en fibra de carbono o plástico de una pieza. Incluyen puntera, crampones o cuchillas en las suelas, alza talón y gancho delantero para mejorar el agarre.
Cómo se utilizan
Fundamentalmente, te permiten andar sobre la nieve de un modo diferente. Lo habitual es efectuar rutas en entornos de nieve fantásticos. El avance es cómodo y sencillo, sin demasiado esfuerzo, de modo que puedes conversar con tus compañeros mientras te ejercitas.
Permiten efectuar recorridos que solo podrías llevar a cabo con esquís, pero de forma más sencilla. Necesitarás acompañar tus raquetas, eso sí, con bastones de altura regulable, a poder ser con roseta de buen tamaño y mango largo con agarradera.
En cuanto a su uso, depende del terreno:
- En llano. Lleva el bloqueo de talón suelto y el alza quitada. Únicamente necesitas caminar con las piernas algo más separadas de lo normal, pisando con firmeza y con pasos no muy largos.
- En subida. Pon el talón suelto y el alza colocada. Avanzar en zigzag siempre ayuda a suavizar el ascenso. Además, echa el peso hacia adelante al moverte.
- En bajada. Bloquea el talón y quita el alza. También te conviene moverte en zigzag y echar el peso hacia atrás para asegurarte de clavar bien los talones.
Rutas para raquetas de nieve disponibles en el Valle de Arán
Esta zona pirenaica es absolutamente sorprendente y atractiva para los amantes de los deportes al aire libre. Sin duda, ofrece magníficas rutas para raquetas de nieve. Tanto si tienes experiencia como si te estás iniciando, puedes disfrutar de paisajes maravillosos y vivir experiencias vibrantes. Hemos seleccionado, a modo de ejemplos, tres de las más recomendables.
Banhs de Tredos
Este recorrido es ideal para empezar con esta práctica si careces de experiencia. Comienza en Salardu y, en dirección sur, permite recorrer la falda de la montaña por el río Aiguamog hacia el Parque Nacional de Aigues Tortes.
El punto de partida es el aparcamiento del hotel de Banhs de Tredos. La nieve virgen, blanquísima, te recibirá con increíble belleza mientras vas dejando atrás el Valle de Arán de un modo espectacular. El recorrido es sencillo y rápido, porque la vuelta es un descenso continuado muy asequible.
Unha, Naut Arán y Bagergue
Estos tres municipios, Unha, Naut Arán y Baguerge han habilitado otras rutas, también asequibles, con extensiones que van entre los 1,28 y los 5,97 kilómetros. Còsta dura 30 minutos, Roqueta se realiza en 1 hora y 10 minutos y Lana en 1 hora y 40 minutos. Los recorridos son fáciles y te permiten disfrutar de rincones únicos en esta bellísima zona.
Embalse y Valle Aiguamòg
Más complicada es esta ruta que conecta Tredós y Salardú. Es un itinerario muy variado, pues incluye pistas, bosques e incluso permite remontar el bravo cauce del río Aiguamòg. No es un recorrido para novatos, requiere contar con algo de experiencia para superar este tracking al completo.
En definitiva, iniciarte en las raquetas de nieve en el Valle de Arán es una elección fantástica que te regalará experiencias únicas. Y, si te animas, siempre puedes alojarte en los apartamentos turísticos que te ofrece Alma de Nieve. ¿A qué esperas?