Esquiar es una de esas experiencias que lo tiene todo: emoción, paisajes que te dejan sin aliento, sensación de libertad y esa mezcla perfecta entre deporte y disfrute. Pero, como en toda actividad física (y más aún si implica nieve, velocidad y cuestas), también entra en juego una palabra que nadie quiere escuchar: lesiones.Y es que da igual si eres debutante o llevas media vida bajando pistas negras: nadie está exento de hacerse daño si no toma unas mínimas precauciones. Por eso, en Alma de Nieve queremos ayudarte a disfrutar al máximo de tu escapada a Baqueira Beret sin sustos ni visitas a la enfermería. Aquí van nuestros consejos más sinceros, como si te los diera ese amigo que siempre lleva ibuprofeno y reflex en la mochila.
Hazle un poquito de caso a tu cuerpo
Sí, sí. Lo sabemos. A todos nos entra el subidón la noche antes de esquiar. Pero tu cuerpo no esquía todos los días del año. Y si llevas meses entre oficina, sofá y Netflix… el cambio es un poco brusco. Lo ideal es preparar el cuerpo unas semanas antes con algo de ejercicio: caminar, bici, sentadillas, elíptica… cualquier cosa que te active piernas, glúteos y core.Y si ya has viajado hasta el Valle de Arán y no hiciste nada de eso, mejor trata de calentar bien antes de ponerte los esquís. Un par de estiramientos, unos saltitos y mover las articulaciones puede marcar la diferencia.
No te saltes el equipo básico
Una buena parte de las lesiones ocurren por llevar un equipo mal ajustado o directamente inadecuado. Si alquilas esquís en Baqueira, asegúrate de que el personal ajusta las fijaciones a tu peso, altura y nivel. No es un trámite sin más: un esquí mal regulado puede no soltarse en una caída y hacerte mucho daño.Ah, y lleva casco. De verdad. No es solo cosa de niños ni de profesionales. Cada año se evitan sustos graves gracias a este pequeño gran invento. Y ya que estás, revisa también las botas: si no encajan bien, te harán torcer el pie con facilidad.
Haz pausas, hidrátate y come bien
Este consejo parece de madre, pero funciona. Cuando estás disfrutando en pista, es fácil olvidarse de parar. Pero cuando llevas varias bajadas seguidas sin descanso, el cuerpo se cansa, los reflejos bajan… y ahí es donde llegan los accidentes tontos.Haz una pausa cada cierto tiempo, tómate una bebida caliente o un agua (sí, aunque no sientas sed, estás perdiendo líquidos) y come algo que te dé energía. Recuerda que una caída por falta de atención o por estar agotado puede arruinarte el viaje.
No te compares
Bájate la pista que te apetece, no la que bajan los demás. Uno de los errores más comunes: dejarse llevar por el grupo. Si tus amigos son más experimentados y deciden irse a una roja, pero tú no lo ves claro… no pasa nada por decir “yo me quedo en la azul”.Respetar tus límites no es de cobardes, es de gente que quiere volver a esquiar mañana. Cada pista tiene su dificultad y no hay ninguna medalla por bajar una negra si lo vas a pasar mal. Además, en Baqueira tienes pistas para todos los niveles y con paisajes espectaculares, así que disfrútalas a tu ritmo.
Atento a las condiciones: el parte meteorológico no es un capricho
Hay días que parece que te está esperando la mejor nieve del mundo, pero también hay días con visibilidad nula, viento o nieve dura como el mármol. Consulta siempre el parte de nieve y las condiciones meteorológicas antes de lanzarte a pista. Y si ves que no es el mejor día… quizás es mejor hacer una ruta en raquetas, darte un paseo por Vielha o quedarte en tu apartamento de Alma de Nieve con un buen libro y una copa de vino.
Aprende técnica, las clases no son solo para principiantes
Si es tu primer día, por supuesto que necesitas una clase. Pero incluso si llevas años esquiando, una clase con un instructor profesional te puede ayudar a mejorar tu técnica, ahorrar energía y esquiar con más seguridad. Y cuanto mejor esquías, menos riesgo tienes de caerte.Piensa que la técnica no solo sirve para ir más rápido o hacer giros perfectos: también te enseña a caerte bien, evitar choques, controlar tu cuerpo. No es postureo, es prevención.
Al terminar el día… escúchate
Cuando salgas de la pista, no te conviertas en superhéroe. Si estás agotado, descansa. Si notas alguna molestia, no la ignores. Un poco de hielo, un baño caliente o un masaje pueden ahorrarte problemas mayores.Y si te alojas en uno de nuestros apartamentos en Baqueira, puedes darte una ducha caliente, ponerte cómodo, tumbarte en el sofá frente a la chimenea y pensar: “qué día más bueno, y encima sigo entero”. Porque en los apartamentos de Alma de Nieve son todo comodidades.
Planifica tu viaje a Baqueira para disfrutarlo, pero también a cuidarte. Esquiar es una experiencia inolvidable, una manera única de conectar con la naturaleza y contigo mismo. Pero el esquí también exige respeto por la montaña, por el entorno… y por ti. No hay nada que arruine más unas vacaciones que una torcedura tonta o una caída por no haber parado a tiempo.Así que ya sabes: calienta, escucha a tu cuerpo, equipa bien, esquía con cabeza y… vuelve a tu apartamento de Alma de Nieve cada tarde con una sonrisa y muchas ganas de repetir al día siguiente.
Y si además llegas con agujetas, enhorabuena: ¡eso significa que lo diste todo!